Tus ojos me cautivan...
tus manos me enternecen
tus caricias me reconfortan
tu voz... me enloquece
tu cuerpo me domina...
Te hace mi amo...
mi rey y señor...
tu boca... ¡ay tu boca!...
con tu sonrisa perfecta,
tu cara sin igual...
Tus brazos fuertes
en los que estoy segura,
tu espalda ancha, varonil
tu pecho en el que me apoyo
rodeando con mis brazos tu cintura.
Soy envidiada por tenerte...
por ser sólo mío...
por amarme, por poseerte,
por tener tu corazón...
y tú... el mío.
Eres más joven que yo...
yo... orgullosa estoy,
nos hemos juntado,
juventud y experiencía.
nos damos amor... calor...
Aprendemos uno del otro...
tenemos pasión, ardor...
eres un volcán...
al que me gusta ver en erupción...
¡qué poderío!
¡Qué satisfacción!
tú quieres aprender...
yo... ser tu maestra.
¡Qué suerte tengo!
al tener un alumno
que no se canse de aprender
y haga los deberes tan bien.
Autora: Lina